jueves, 8 de febrero de 2018

Los motivos para aprender idioma con una aplicación

En los últimos años he tratado de aprender el idioma italiano, pero sin ayuda de un profesor. Es que por razones de horarios de trabajo no tengo tiempo para ir a una clase con un docente. 

Entonces busqué distintas aplicaciones. Primero empecé estudiando en busuu.com, que incluso ofrece la posibilidad de interactuar con otras  personas de la lengua nativa del idioma que uno está aprendiendo a través del chat.  Permite también un trabajo colaborativo, porque al realizar el ejercicio, uno busca personas que tengan ese idioma como lengua materna para que lo corrijan. Realizan correcciones muy buenas con comentarios muy completos, en muchos casos. Como contrapartida, la persona debe corregir ejercicios realizados por otras personas en español, como es mi caso. 

Luego me enteré de que existe otros lugares como Babbel Duolingo, entre otras. 

Duolingo es una aplicación que descargué a mi celular. Y en momentos libres realizo ejercicios de italiano. Últimamente también empecé a repasar francés e inglés. Como estos idiomas los aprendí de niña y adolescente, las palabras aunque están bastante olvidadas por el desuso, están en algún lugar de la memoria y no me ha resultado muy difícil. A medida que realizo los ejercicios van resurgiendo en mi memoria esas palabras que por años estuvieron ahí, sin recordarlas y sin usarlas. 

El idioma italiano tiene muchas palabras que son iguales a sus equivalentes en español y otras muy diferentes que no se parecen en nada. Ni a su equivalente en español ni en francés ni en inglés (por ejemplo "fidanzato" que significa "novio")

Entonces como es un idioma nuevo para mí, me lleva horas aprender y avanzo despacio. Todo depende de la continuidad y de la periodicidad con que lo estudio. La aplicación Duolingo tiene la ventaja que me muestra las lecciones que hace tiempo que no repaso mediante el cambio de color. Cuando las repaso, me doy cuenta de que me he olvidado de muchas de ellas. 

En mi casa tengo muchos libros de idiomas: francés e inglés de cuando los estudié por primera vez. Y otros de mis  hijos que nunca los utilicé pero podría hacerlo. También tengo algún libro de italiano de mi hija cuando lo estudiaba en el Centro de Lenguas Extranjeras. Y hace unos años compré en la Feria del LIbro de Montevideo un libro de Gramática Italiana. Mi esposo que sabe como siete idioma diferentes y que logra hacerse entender por los nativos de esos idiomas muy bien o en forma aceptable (en algunos casos) me dice por qué no los estudio en los libros. 

No es que porque exista la tecnología ahora se deban dejar de lado los libros. No. Son cosas que se complementan, que no son opuestas. 

¿Por qué prefiero aprender idioma con una aplicación? 

Por varios motivos: 

-Además de la escritura de la palabra o de las frases me proporciona el sonido en ese idioma. En un libro de italiano yo no puedo oír la pronunciación de "oggi", por ejemplo (hoy) o en un libro de francés no sé como pronunciar "aujourdhui" 
- Son interactivos: escribo o realizo ejercicios  de selección múltiples tanto cuando armo las frases como cuando elijo la frase correcta. No solamente leo y escucho.
- La corrección es inmediata. Si hago mal pierdo un corazón. Y si pierdo todos los corazones antes de culminar el ejercicio debo hacerlo de nuevo. Es decir, se parece a un juego (videojuego) Entonces tiene la motivación de los videojuegos. 
- Lo puedo realizar en cualquier lugar sin más requisito que contar con mi celular. Puedo hacerlo en la parada del ómnibus, por ejemplo, para matar el tiempo de la espera. Sin necesitar lápiz y papel (eso no quiere decir que cuando esté en mi casa no haga ejercicios con lápiz y papel, pues ayuda a recordar esas palabras)

- Si paso más de 24 horas sin usar la aplicación me suena el celular (con un sonido diferente a todos los demás ) y donde está el ícono de la aplicación "no has alcanzado tu meta diaria"
Entiéndase bien que no estoy en contra de los libros ni de las clases dictadas por un docente. Simplemente, considero que estas aplicaciones pueden ayudar de una forma divertida al aprendizaje de un idioma. Y en casos especiales, cuando no se puede recurrir a una clase presencial, es una buena opción para aprender un idioma o para refrescar conocimientos sobre idiomas aprendidos en el pasado y que han sido olvidados por la persona por falta de práctica.